Rías Altas para un viernes
Hoy un cliente me ha traído este regalo. Por contestarle y atenderle a horas intempestivas, por comprenderle, por defender sus legales derechos, por estar ahí. Creo que no es mérito mío, la profesión tiene mucho de vocación. No sueltas el teclado y te vas cuando hay temas y vivencias/dramas personales por resolver.
En fin, no sé si me lo merezco pero me ha hecho mucha ilusión. Brindaré a su salud, por la gente agradecida, amable, simpática y generosa que hace que los días sean más bonitos.
Buen fin de semana y chin chin