Hemos oído hablar, leído en prensa o por lo menos nos suena  la afirmación “ los índices de natalidad han bajado en picado respecto a años anteriores”

Así es, o así se manifiesta últimamente en mi despacho. Y es que las controversias entorno a los cuidados de nuestros padres son cada vez mayores y más sonadas.

En casa de los Sres P la disputa está servida desde mayo de 2023. El Sr. P fue diagnosticado de la enfermedad de Alzheimer, sus familiares iniciaron un procedimiento de adopción de medidas judiciales de apoyo a personas con discapacidad, con el resultado del nombramiento de la Sra. p como asistente con funciones representativas (tutor) de este. En mayo la Sra. P fallece. Al Sr. P se le debe nombrar un nuevo asistente de forma urgente, el Sr. P está en el limbo de posible toma de decisiones.

Tenemos dos candidatos para ser asistentes del Sr. P: su hija y su hijo, cuya relación es cuanto menos nula.

Remedio: Iniciar un procedimiento judicial de nombramiento de nuevo asistente (tutor) presentando escritos en el juzgado acerca de la idoneidad de cada uno de los hermanos para tomar decisiones en nombre del Sr, P. y si la relación ya era complicada ahora más. 

A la espera de resolución judicial mi recomendación, aunque ya tarde para ellos, es la de realizar poderes notariales preventivos donde precisamente se “prevea” quien se encargará de la toma de decisiones en torno a decisiones médicas, gestión de patrimonio, gestión de cuentas bancarias etc.

Tomemos las riendas de nuestra vida, de nuestra vejez y enfermedad, viviremos más tranquilos.